Bibliografía:
San Alberto Magno es un místico que descubre a Dios en el encanto de la creación. Y un místico mariano, con una sencilla y profunda devoción a la Virgen María. Su amor a la Virgen es ingenuo y profundo a la vez. Es preciso destacar que San Alberto estudia, investiga, analiza todo en función de la Santa Predicación; por eso utiliza tanto las Ciencias Naturales, Biología, Botánica, Química, Zoología, Arqueología, como la Filosofía y la Teología.
Podemos descatacar q hay 2 versiones donde dicen que murió a la edad de 87 (o 74) años, cuando se hallaba sentado conversando con sus hermanos en Colonia, y otra q el murió en 1.279 se debilita física y mentalmente. Ese mismo año redacta su testamento y muere, con serenidad y paz, sobre su mesa de trabajo. Era el 15 de noviembre de1.280.
Pero en l262 presenta su dimisión, por sentirse hecho mucho más para la enseñanza de la filosofía y de la teología que para la administración de una diócesis.
Obras:
En el dominio que ahora es el de las “Ciencias naturales” y de la psicología, Alberto Magno llega a ser un precursor con sus numerosos tratados: “Del cielo y del mundo”, “De la Naturaleza de los lugares”, “De las propiedades de los elementos”. “De la generación y de la corrupción”, “De los meteoros” (cuatro libros), “De los minerales”, “De los vegetales”, “De los animales”, “De la naturaleza y del origen del alma”, “De la nutrición”, “ Del sentido y de la sensación”, “De la audición física”, “De la memoria”, “De la reminiscencia”, “Del intelecto y de lo inteligible”, “Del sueño y de la vigilia”, “Del alimento y la respiración”, “De los movimientos de los animales”, “De la edad, la juventud y la vejez”, De la muerte y la vida”. Se le atribuye, no sin verosimilitud, una obra sobre alquimia.
Es siempre la doctrina del incomparable Maestro la que Alberto sigue, analiza y propone en su estudio de los l3 libros de la Metafísica de Aristóteles, y luego de los l0 libros de su Ética, y de los 8 libros de su Política.
Alberto Magno fue el primero en substituir las concepciones y métodos de Aristóteles a los de Platón.
Ideas principales:
1°.La Filosofía de Alberto Magno es la Filosofía aristotélica, incorporada y como encarnada en la Filosofía cristiana, en la parte en que aquélla no se opone a las verdades fundamentales de ésta, pero sin excluir, antes bien asimilándose elementos platónicos e ideas de las escuelas árabes, judaicas y neoplatónicas. Alberto Magno, lejos de seguir ciegamente a Aristóteles, según piensan algunos, pone de manifiesto y combate sus errores cuando se presenta la ocasión; reprende y ridiculiza a los que hacen de él una especie de Dios, y recuerda oportunamente que, puesto que fue un hombre como nosotros, pudo errar como nosotros.
2°.Aunque concede cierta preferencia a Aristóteles por la mayor universalidad y variedad de sus conocimientos, reconoce a la vez la importancia especial de Platón, a quien coloca al lado de Aristóteles, considerándole como complemento necesario y natural del Estagirita en el terreno filosófico, de manera que, en concepto de Alberto Magno, las Filosofías de Aristóteles y de Platón se completan la una a la otra.
3°.Con respecto a su teoría cosmológica, conviene tener presente que, lejos de admitirla emanación divina del mundo, como tan inexactamente y tan sin fundamento le atribuye Tennemann, enseña y afirma terminantemente que Dios creó el mundo de la nada.
4°.Alberto Magno la ciencia del Ser y de sus propiedades trascendentales, entre las cuales son las más importantes la unidad, la verdad y la bondad, conceptos que este filósofo analiza y discute con notable profundidad, lo mismo que la idea de Dios, que constituye el objeto de la teología natural. Al desenvolver el concepto metafísico de Dios, se acerca a la concepción ontológica de San Anselmo, y hasta parece aceptarla, puesto que dice que es propio de Dios, no solamente existir, y no poder dejar de existir, sino no poder pensarse su no existir.
5°.Su concepción psicológica es tan completa, filosófica y científica como permitía el estado de la ciencia a la sazón, siendo muy numerosas y acertadas las observaciones de que echa mano al desenvolver el concepto del alma racional en sí misma, en sus facultades, en sus relaciones con el cuerpo y hasta por parte de la gradación o escala de la vida y de sus manifestaciones.
6°.Su concepción psicológica es tan completa, filosófica y científica como permitía el estado de la ciencia a la sazón, siendo muy numerosas y acertadas las observaciones de que echa mano al desenvolver el concepto del alma racional en sí misma, en sus facultades, en sus relaciones con el cuerpo y hasta por parte de la gradación o escala de la vida y de sus manifestaciones. Alberto Magno expresa gráficamente esta gradación cosmológica, o, digamos mejor, biológica, diciendo que la razón está creada o tiene su lugar propio en la sombra, como si dijéramos, en la penumbra, en la atmósfera, en los confines de la inteligencia, los sentidos en la sombra o penumbra de la razón, y la vida vegetativa en la sombra o confines de la sensibilidad.
7°.Por lo que hace a sus conocimientos en ciencias naturales y físicas, es indudable que eran muy superiores a los de sus contemporáneos, como lo comprueban a cada paso sus obras, en las que discurre acertadamente acerca de cuestiones difíciles de resolver en su tiempo, y rechaza preocupaciones muy arraigadas por entonces aun entre los sabios. Alberto Magno, no sólo admite la existencia de antípodas, sino que alega razones y argumentos para probar que la zona tórrida es habitable, mientras que por otro lado rechaza las preocupaciones y temores del vulgo y de los sabios acerca de la fascinación y demás daños que se atribuían a las artes mágicas.
8°.También se equivocaría grandemente el que creyese que Alberto Magno, al desenvolver el concepto de Dios, presenta una concepción árida, descarnada, puramente dialéctica. Lejos de eso, su concepción sobre este punto capital de la metafísica es una concepción tan profunda y filosófica, como animada, espontánea, llena de sentimiento y de vida. Después de sentar que la concentración y reflexión del alma sobre sí misma la prepara y dispone para elevarse al conocimiento de Dios, de manera que el alma nos sirva de escala para llegar a la contemplación intelectual de Dios, el filósofo alemán nos habla en términos magníficos de esa esencia divina que contiene en sí desde la eternidad y en unidad simplicísima las perfecciones de todas las cosas de ese Dios que puede y sabe crear con una simple señal de su voluntad seres y seres infinitamente más perfectos; de ese Dios en quien existen de una manera inmutable los principios, las razones y las esencias de las cosas mudables; en quien están y viven todas las cosas sin confundirse ni identificarse con su esencia; que da a todas las cosas el ser, el poder y el obrar, o sea la substancia, la virtud o facultad y la operación, y que extiende su providencia a todo, desde lo máximo hasta lo mínimo, desde los géneros más universales hasta los individuos.
Comentario:
Alberto Magno era un filósofo, químico el cual estaba
interesado sobre “la verdad”. El investigo mucho sobre la existencia y la
creación del ser y todo lo que nos rodea. En aquellas investigaciones que él
tuvo a través de algunos filósofos como, Aristóteles, platón entre otros,
descubre a Dios el encanto de toda
creación. Él quiso profundizar más haya el tema de la santa predicación, por
esto el investigo mucho a través de las ciencias naturales, la filosofía, loa
zoología, la tecnología, biología etc. Alberto Magno piensa q las filosofías de
aristones y plantón se complementan tanto una como la otra.
Él nos deducía q la forma como actuábamos y como pensábamos
sobre la refelxion de nuestra alma nos
servía para esta en una escala más cerca para contemplar la contemplación de
Dios.
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